Laberintos de un desierto no tan desierto.

Laberintos de un desierto no tan desierto es un experimento para confrontar el cuerpo desde una mirada interna hacia la mirada externa, inspirada por el miedo y la atrayente idea de romper con mis estigmas y por el deseo de desnudarme en espacios abiertos en la naturaleza .

Lo poetico de la piel habitando lo organico, tocar tierra con la pelvis, pisar agujas de hierba seca, montar piedras altas y usar mis garras para detenerme, despojarse del miedo a mostrar lo que tambien soy, dentro y fuera, dejar de preocuparme por como se ve, para adentrarme en la belleza de lo simbolico, afirmarme de este desierto y fundirme en el. 

Esta serie es como siempre habia pensado que me gustaria hacer autorretratos, un ritual personal para soltar, pero tambien una guia para empezar a formar nuevos senderos.

Laberintos de un desierto no tan desierto viene de la metafora que tengo sobre mi sentir y lo que soy, en este caso, con el desierto de Baja California en el que comunmente, cuando se piensa en desierto, es un lugar seco, inhabitado, casi muerto y como, por el contrario, el desierto de la peninsula es todo diversidad de vida, lo mismo que con mis inquietudes artisticas en las que mi temor al rechazo y a fallar no son lo que predomina sobre mis deseos de crear y compartir, laberintos los que hay que caminar para llegar a lugares escondidos, pero tambien los que hay en mi mente.

Inspirada en la artista Anna Mendieta y su interpretacion del cuerpo femenino en performance y fotos que hace usando como herramienta la naturaleza y su cuerpo, y en la fotografa Angelica Escoto, con sus bellisimas imagenes del desierto bajacaliforniano, decidi salir a dar un paseo por uno de mis lugares favoritos camara en mano.  

 

 

 

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Laberintos de un desierto no tan desierto is an experiment to confront the body from an internal look to the external look, inspired by fear and the attractive idea of ​​breaking my stigmas and by the desire to get naked in open spaces in nature.

The poetic of the skin inhabiting the organic, touching the ground with the pelvis, stepping on needles of dry grass, mounting tall stones and using my claws to stop myself, getting rid of the fear of showing what I also am, inside and outside, stopping worrying about how It is seen, to enter into the beauty of the symbolic, to affirm myself from this desert and merge into it.
This series is how I had always thought I would like to make self-portraits, a personal ritual to let go, but also a guide to start forming new paths.

Laberintos de un desierto no tan desierto comes from the metaphor I have about my feelings and what I am, in this case, with the Baja California desert in which commonly, when you think of desert, it is a dry, uninhabited place, almost dead and how, on the contrary, the desert of the peninsula is all diversity of life, the same as with my artistic concerns in which my fear of rejection and failure are not what predominates over my desire to create and share, labyrinths the that you have to walk to get to hidden places, but also those that are in my mind.

Inspired by the artist Anna Mendieta and her interpretation of the female body in performance and photos that she takes using nature and her body as a tool, and by the photographer Angelica Escoto, with her beautiful images of the Baja California desert, I decided to go out for a walk through one of my favorite places, whit camera in hand.